Curiosidades de Ámsterdam

Curiosidades de Ámsterdam

Ámsterdam es una ciudad diferente y especial. En vuestra visita encontraréis pequeños detalles que llamarán vuestra atención y os gustará saber su significado.

Las casas inclinadas y sus ganchos

Debido al alto precio del suelo en Ámsterdam, las casas se construyen con una forma estrecha y alargada. Por sus empinadas y pequeñas escaleras es prácticamente imposible subir grandes objetos o muebles.

Ante este problema, instalaron en la parte superior de las casas una especie de ganchos sobre los que colocan poleas para poder levantar los muebles e introducirlos en las viviendas.

Para facilitar este proceso, las casas se construyen ligeramente inclinadas hacia adelante y parece que vayan a derrumbarse en cualquier momento.

Sólo tenéis que levantar la vista para observar este curioso gancho que corona cada una de las viviendas de Ámsterdam.

Las tres equis (XXX)

Comenzando por la bandera de Ámsterdam, dondequiera que miréis encontraréis estas tres equis estampadas por toda la ciudad. Su significado es difícil de explicar y ni siquiera los holandeses se ponen de acuerdo en el origen de estas siglas.

Una de las teorías es que San Andrés, uno de los apóstoles y patrón de Ámsterdam, murió en una cruz con forma de equis.

Según otras versiones más románticas, se dice que las tres equis representan el valor, la determinación y la misericordia, que son los tres adjetivos con los que denominó la ciudad la Reina Guillermina.

La última y no menos importante es la versión de que las tres equis representan los desastres que han afectado a la ciudad a lo largo de su historia. Estos son los incendios, las inundaciones y la peste.

Los Hofjes

En Ámsterdam desde siempre ha habido una gran tradición de ayuda a los necesitados. Esta responsabilidad recaía sobre la iglesia en la Edad Media y, en el siglo XIV, pasó a manos de las autoridades municipales que distribuían comida y creaban instituciones para ayudar a los más necesitados.

En el siglo XVII muchos comerciantes ricos fundaron casas de acogida para los más necesitados: los hofjes.

Uno de los hofjes más conocidos y mejor conservado que se puede visitar en Ámsterdam es Begijnhof.

También podréis visitar los preciosos patios ajardinados de algunos otros hofjes como el de Zon y el de Star. Se encuentran muy próximos uno del otro, en la calle Prinsengracht, cerca de la Casa de Ana Frank.